Las andanzas de esta vida me han llevado a las grandes puertas del conocimiento: La Universidad.
Supongo que uno sabe muy bien como empieza en estas cosas pero nunca como acaban, aunque para entonces seguro que tanto vosotros como yo sabremos cual fue es el final de esta historia que empiezo a contaros hoy con el simple título de “Perdido Por Vigo”.
No fue lo primero en lo que pensé cuando me decidí a hacer esta “sección” del blog, pero finalmente creo que es la mejor manera de plasmar lo que ha sido el comienzo de mis aventuras en esta ciudad.
Es difícil llegar a una ciudad casi desconocida y empezar una vida de cero. Bueno, es cierto que no dejé atrás mi vida pasada ni me pierdo mirando en el baúl de los recuerdos pero comenzar aquí implica enfrentarse a una nueva vida.
Y la primera muestra de ello es el sistema de transporte urbano que, bien por desinformación o mala organización de la empresa, me tuvo horas perdido por Vigo buscando una parada que me sirviera y una vez en ella tener la incerteza de si pasará o no pasará.
No pasó.
Así que tuve que encontrar una parada de taxis y pagar 16 generosos Euros por un viaje que no los merece. Pero tras ser apuñalado vilmente por el taxista abrí la puerta de una habitación vacía de recuerdos que estoy seguro de que entrada a entrada se irá llenando con más y más momentos de esos que tendemos a llamar “inolvidables”.
Y tras varias noches de sueño interrumpido, adaptabilidad y desorientación me enfrenté a mi primer día de clase. No es lo que te venden pero tampoco fue lo que me esperaba. No me decepcionó, pero tampoco creó en mí un sentimiento de “universitario”. Supongo que no tiene por que pasar, pero quería creer que no era ocupar un asiento público durante los próximos tres años.
Lo que peor se lleva en cierta manera es la soledad, pero se compensa con la paz que tras un verano de no parar por fin encuentro. A veces desearía poder llamar a alguien y poder charlar, sentir la voz de otra persona; pero eso rápidamente se pasa y sé que “Cuando arrive a casa…” todo será como siempre.
En la próxima entrada os seguiré contando.
5 Chapuceros:
si en el fondo hasta echaras de menos cuando te tocaba las p...... XD
¿Eso que vislumbro es la residencia del CUVI?
Si, es la residencia del Cuvi.
En la Universidad de Vigo? Somos casi vecinos entonces.
Pudimos haberlo sido. Yo estuve ahí sólo el primer año, luego ya estuve en Vigo "ciudad". Te recomiendo que te compres un nivelador para el suelo (en invierno con las lluvias se hunde por un lado), que compres también un armazón (en invierno con el viento las chapas de fuera se desconchan), y que tengas paciencia con los buses (en invierno con el viento y la lluvia más de una vez se queda uno atrapado arriba porque no suben los buses...)
Si Vigo te parece caótico...espera a llevar ahí 3 meses...
¡¡Buena suerte!!
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